domingo, 27 de noviembre de 2011

Curiosity: Rumbo a Marte

El sábado 26 de noviembre, a las 16’02 hora española, partió un cohete Atlas V-541 desde el Kennedy Space Center de Florida (EEUU) con dirección a Marte. En su interior viajaba el tercero de los rover que seguirán el proyecto de estudio de la superficie del planeta Rojo en busca de indícios de la posible habitabilidad del planeta y para comprobar si alguna vez nuestro vecino más cercano pudo albergar vida en su pasado.
El Curiosity forma parte junto a los otros dos exploradores gemelos, el Spirit (lanzado en junio 2003) y el Opportunity (lanzado en julio de 2003), de un proyecto llamado genéricamente MER Mars Exploration Rover (Rover explorador de Marte) cuyo objetivo es la exploración y estudio del suelo y los componentes rocosos de la superficie marciana para comprobar la posible existencia de vida en un pasado y la posibilidad de adaptar la vida en un futuro.
El Curiosity, bautizado con este nombre por Clara Ma, una niña de doce años de Kansas, explorará la superficie de Marte durante todo un año marciano, es decir, 686 días, algo menos de dos años terrestres. Entre otras cosas, Curiosity utilizará todo su complejo arsenal de aparatos científicos y técnicos, incluido un láser, para recolectar y analizar rocas allí mismo, en busca de moléculas orgánicas y enviando los resultados a la sonda Mars Odissey que orbita el planeta y que a su vez ésta enviará a la Tierra los datos.
Mientras que el Spirit y el Opportunity no eran más que pequeños exploradores con laboratorios autónomos muy simples, el Curiosity, con el tamaño de un automóvil, está mucho más adaptado para obtener muestras, tratarlas y hacer el análisis in situ de los materiales que consiga. Esta vez parte del instrumental de trabajo del explorador incluye material español, concretamente se trata de la estación meteorológica REMS que servirá para investigar determinadas cuestiones climáticas de Marte.
El rover tomará contacto con la superficie marciana en el cráter Gale, de 150 kilómetros de diámetro, y elegido por los científicos de la NASA por contener, aparentemente, trazos de haber sido en un pasado un lago, considerando así que allí se podrá encontrar una importante acumulación de datos sobre la historia geológica del planeta. De hecho, no hace mucho que la sonda Mars Odissey descubrió lo que parecía ser hielo en algunas zonas del planeta rojo, cosa que indujo a pensar a los científicos que bajo la superficie marciana se puede esconder un gran tesoro en forma de mares de agua subterráneos.
Pero para esperar a tener los primeros datos obtenidos por el robot Curiosity tendremos que esperar hasta agosto de 2012, ya que está previsto que el viaje hasta Marte dure ocho meses, el tiempo que tardará en recorrer los casi 59 millones de kilómetros que le separan de nosotros durante el perihelio o punto más cercano de su órbita al Sol. De hecho, la distancia entre Marte y la Tierra viene dada por las posiciones relativas de ambos. El planeta rojo siempre se encontrará más cercano a nosotros cuando entre en oposición, variando su órbita respecto a la de la conjunción. Cuando Marte está en oposición a la Tierra, cosa que ocurre cuando entra en el perihelio, suele estar a los ya citado 59 millones de kilómetros en contraposición de los 102 millones de cuando esta en conjunción con la tierra durante su afelio, es decir, el punto de la órbita más lejano del Sol.

Datos de Marte

Marte es el cuarto planeta rocoso y el más alejado del Sol de los llamados planetas telúricos internos. El resto de planetas, los llamados externos, son todos gaseosos. Aunque la forma de Marte es redondeada los achatamientos polares le confieren como a la Tierra cierto aspecto muy tenue de elipse. Además, el tamaño de Marte es casi la mitad del de nuestro planeta, con un diámetro ecuatorial de 6.794 Km., algo más de la mitad que el terrestre, que es de 12. 756 Km. pero al adolecer de mares superficiales, la extensión de tierra firme que se extiende por el planeta es casi la misma cantidad que la de la Tierra. Debido a ello la masa marciana es también menor que la de nuestro planeta, y su escasa densidad comparada con la terrestre produce una menor fuerza gravitatoria, haciendo que, por ejemplo, un cuerpo pese un tercio de su propio peso en su superficie.
Marte tiene una morfología compuesta por infinitos cráteres de impacto, planicies de lava, volcanes, suaves colinas y abruptas montañas y extensas llanuras de dunas y polvo. El color rojo característico del planeta se debe a la gran cantidad de óxidos de hierro contenidos en los basaltos volcánicos, que en la superficie se convierten en destacadas zonas de enormes desiertos de polvo rojo y piedras que cubren gran parte del planeta y que le dan el aspecto, visto desde el espacio, de poseer enormes mares rojizos, los cuales están azotados constantemente por grandes vientos que mueven en realidad las ingentes masas de polvo marciano.
Por otro lado, Marte dispone de una tenue atmósfera compuesta de diferentes elementos en cantidades precarias, pero donde su principal elemento es el Dióxido de Carbono, el cual forma el 95% del total de la atmósfera; Oxígeno con un contenido total de 0,13% y elementos como el Nitrógeno, Argón, Oxígeno, Vapor de agua, Metano, Ozono, Xenón, Criptón, entre otros. Debido a esta tenuidad en su atmósfera, si alguien visitase el planeta y quisiese hablar con algún interlocutor tendría que hacerlo a grandes gritos, pero de todas formas el grito más potente no dejaría de ser un mero susurro.
La temperatura de Marte es muy fría por el día ya que se puede llegar a alcanzar los –25º durante el mediodía marciano y es extrema durante la noche, pudiéndose alcanzar entonces los –87º , también cabe añadir que Marte tiene estaciones igual que la propia Tierra y que la duración de su día es de 24 horas y 39 minutos aproximadamente.
En la geografía marciana destacan dos cosas a parte de los infinitos cráteres que configuran su aspecto: Por un lado el volcán llamado Monte Olimpo, situado en el sistema de la Tharsis Planitia, una meseta con inmensas llanuras y que se trata del volcán más grande de todo el sistema solar, con una extensión de extremo a extremo tan grande como la Península Ibérica y una altura de 25 kilómetros. Por el otro lado la enorme fractura ecuatorial que divide el planeta en dos hemisferios muy diferenciados. Se trata del Valles Marineris, un inmenso cañón de 4.500 Km. de longitud y 200 Km. de anchura, que recorre el planeta por su ecuador y que es diez veces más largo y siete más ancho que el gran cañón del Colorado y que debe su nombre a la sonda Mariner 9 que lo descubrió en 1971.
Hasta aquí una breve reseña de la noticia y del planeta Marte. Como enlaces les dejo la págiina de la NASA con noticias sobre el proyecto del Curiosity y los vídeos del despegue del Atlas V –541 con el Curiosity a bordo y la recreación artística informatizada de la llegada de éste a Marte.
Que lo disfruten.
Propicios Días.
Gilgamesh.

Página de la NASA Mars Science Laboratory

DESPEGUE DEL ATLAS V- 541



RECREACIÓN DEL CURIOSITY EN MARTE


domingo, 31 de julio de 2011

¿Cómo se formó la Tierra?

Seguramente, Muchos de nosotros nos habremos preguntado alguna vez como serían los momentos aquellos en que la Tierra se formó. Una respuesta sería al parecer que, en un momento del principio, hace 4500.000.000 de años, ésta era una convulsa bola ígnea, muy distinta a como la conocemos hoy día.
Efectivamente, tras el nacimiento de nuestra estrella, el Sol, hace 5000.000.000 de años, la materia sobrante de su formación, llamada disco proto planetario sirvió para ir formando por acreción del núcleo la cohorte planetaria que le acompañaría durante su existencia. Pero esto no fue de forma súbita, sino que necesitó muchos miles de años antes de consolidarse. Durante este lapso de tiempo la Tierra no fue más que una hirviente bola de magma y gases a elevadísimas temperaturas, azotada por la caída de miles de meteoritos y cometas.
Posteriormente esa proto Tierra comenzó a atemperarse y las capas más externas se enfriaban lentamente, pero el interior de esta estaba tan caliente que aquellas capas no aguantaban sólidas por mucho tiempo. Finalmente la Tierra alcanzó una temperatura estable mucho más fría, pero los volcanes continuaban vomitando al exterior inmensas cantidades de vapores y lava hirviendo, lo que coadyuvó a que el grosor de aquella frágil corteza fuese creciendo paulatinamente. Los nuevos gases que acompañaban a las erupciones quedaron atrapados conformando una prístina atmósfera, en la cual flotaba una acumulación de moléculas de hidrógeno y oxigeno que terminaron formando unas moléculas de mayor tamaño: las de agua. Estas partículas de agua, cuando aquella atmósfera constituida por gases como el metano entre otros, se enfrío lo suficiente, fueron devueltas a la Tierra en forma de lluvia que duró cientos de años, creando los mares primigenios.
Pero todo esto que cuento merece un post en especial sobre el mismo, ahora no han sido sino unas meras y sucintas pinceladas, pero para ilustrarlas que mejor que un vídeo (Que es mejor visualizar a pantalla completa) con una espectacular recreación de la National Geographic sobre como pudo ser el nacimiento de nuestra Tierra. Que lo disfruten.
Gilgamesh




lunes, 23 de mayo de 2011

Cibernética y Futuro


En una conferencia de prensa celebrada el año pasado en Osaka, Japón fue presentado el robot Geminoid TMF. Se trata de un robot hecho a imagen y semejanza de una atractiva modelo y que tiene la capacidad de reproducir las expresiones faciales de la misma. El robot puede mover su piel facial para imitar una sonrisa, reír mostrando los dientes y fruncir las cejas al recibir las señales eléctricas
En la conferencia presentaron a la modelo junto con su doble cibernético. Ambas iban vestidas de la misma manera, una chaqueta y una falda de cuero negro. La modelo llegaría a decir más tarde a los periodistas que se sentía como si tuviese una hermana gemela.
Geminoid TMF hizo las delicias de todos regalando sonrisas y riéndose de las carantoñas que le hacía su “hermana” de carne y hueso (foto) El robot actúa así debido que se filmaron con una cámara de vídeo todas las expresiones del rostro de la joven, proporcionando al robot la información suficiente para analizarlas y reproducirlas exactamente.
Los desarrolladores dijeron esperar que el robot fuera eventualmente utilizado en situaciones de la vida real, como por ejemplo en los hospitales.
“Tenemos datos que confirman que el robot ya ha dado cierta confianza psicológica con sus movimientos de cabeza y sus sonrisas a algunos pacientes cuando eran examinados por los médicos.” Dijo Satoko Inoue, portavoz de la empresa Kokoro una de las dos compañías involucradas en el desarrollo.
Una nueva tecnología siempre crea algún miedo y opiniones negativas, pero los investigadores buscan hacer robots que puedan expresar algo similar a las emociones humanas. Añadió Hiroshi Ishiguro, profesor de la Universidad de Osaka, que dirige la investigación.
Ahora la empresa tiene una serie de copias del robot para ser vendidas al precio de 10 millones de yenes ( unos 80.000 euros) a diversas organizaciones de investigación sobre robots.
Pero no sólo de imitaciones del genero femenino viven las industrias de la cibernética japonesa. También los robots semejantes a animales de compañía tienen su hueco en el mundo de los droides.
Se puede comprobar en el enlace del vídeo que acompaña a este post y en que podemos ver a un gato robot que hace lo mismo que haría uno de carne y hueso. Maullar, mostrar gestos con su felino rostro, detectar la llegada de alguien en la habitación, etc.
Muy interesante todo este mundo y creo que estamos, o los japoneses en realidad, muy avanzados en el tema de la cibernética. Está claro que los nipones son un pueblo que gusta del futuro y los robots son para ellos el icono más evidente de ese futuro que se nos prometió hace unas décadas atrás. Un futuro plagado de robots casi humanos, naves espaciales y extraterrestres venidos de infinitos mundos habitados. Pero ciertamente estamos muy lejos aun de ese futuro de ciencia-ficción. La carrera del espacio ha quedado relegada, y más ahora con la crisis generalizada, a un nivel muy bajo del escalón de prioridades de los países involucrados en ello.
Los mundos habitados son del todo esquivos a nuestra ciencia y a nuestros aparatos de rastreo, tanto ópticos como de señales de radio. Las ideas de un mundo habitable y que podamos colonizar queda cada vez más en las regiones más inaccesibles de la utopía o la entelequia.
Durante las décadas que van de los 50 a los 80, la ilusión de creer que el universo estaba lleno de civilizaciones avanzadas y que nos visitaban en platillos volantes, alimentó la esperanza de muchos en que llegaría el día de un contacto con unos supuestos hermanos del cosmos. Pero la ciencia y la realidad han demostrado que todo ha sido pura ilusión y que la explicación a los famosos platillos volantes solía ser mucho más mundana que la visita de seres de otros mundos. La ciencia hoy por hoy ha demostrado que no hay ningún planeta, al menos cercano, en el que pueda habitar una civilización, ni avanzada ni atrasada. Ni tan siquiera que pueda albergar vida. Y los planetas que pudieran tener unas condiciones parecidas al nuestro están tan lejos para que nos visiten los supuestos habitantes como para que entre en nuestros objetivos colonizarlo a medio o largo plazo. Hoy día, en la capacidad de nuestra ciencia y nuestra tecnología estamos muy, muy lejos de lograrlo.
Por otro lado la cibernética avanza, pero muy despacio. Lejos están aun los robots autónomos que puedan hablar y charlar con nosotros como si de personas se tratara. Los C3PO de la Guerra de la Galaxias o los Terminators de la película del mismo nombre, aun siguen esperándonos en su inaccesible reino de la Fantasía y la ciencia-ficción.
Es una lástima no haber podido conocer ese futuro que propugnaban los autores de Fantaciencia, pero no debemos quejarnos, ya que nuestro mundo sería algo mágico para un hombre de ciencia del siglo XIX. Y no digamos para un campesino de la edad media, para él nuestro mundo sería como una visión del infierno. Incluso, para un hombre o mujer de los años 50 o 60 nuestros adelantos tecnológicos serían cosa que les causaría gran admiración. Por ejemplo ¿Qué hubiera pensado un joven de principios de los 60, que solía hacer sus fiestas en guateques caseros con unos tocadiscos de maleta, si le dijésemos que hoy nuestra música ya casi no tiene soporte físico y que se reduce a un código binario de digitalización? Nos tomaría por locos.
Como enlace de vídeo les dejo el del robot Asimo de Honda.
Propicios días.
Gilgamesh.

EL ROBOT ASIMO